Mamá, cada vez que veo tu foto me pongo triste. Sé que no podemos estar juntos todo el tiempo, pues tu trabajo te lo impide. Y aunque casi no te veo, tu recuerdo sigue en mi mente. ¿Cómo olvidar tu bello e inconfundible rostro, tus mejillas rosaditas y tu cabello liso y café como el de una princesa? Recuerdo de ti, tu exquisita comida, en especial, la lasaña. Siempre te gustaba que te pidiera mucha y con mucho cariño me decías: “Hijo, come todo lo que quieras, que esto es para ti.” Incluso, después de cada almuerzo siempre me comprabas una paleta llamada "sombrillita"; creo que todavía existe, y tu sabor favorito siempre fue el zapote. ¡Qué tiempos aquellos!
También recuerdo aquellas tardes en la que si terminaba la tarea, me dabas un refrigerio. En las noches de vez en cuando solíamos comer en algún restaurante lujoso. A la hora de acostarme, siempre me dabas un besito en la mejilla y decías: “Que pases buenas noches Boris y sueñes con los angelitos”.
Gracias a tus consejos cuando era pequeño, he llegado a ser quien soy: Eras tú la que siempre daba un buen ejemplo dentro y fuera de casa, y gracias a ello he aprendido a ser una persona integral. Debo reconocer que siempre fuiste una mamá alcahueta que consentías todos mis caprichos. A veces te enojabas, pero sólo era por pequeños momentos. Muchas veces pasábamos muy alegres, debido a tus ingeniosos “chistes de Pepito”.
Pero lo que más recuerdo de ti es tu amabilidad y cariño conmigo. Nunca dejabas de mimarme y sonreír. Tu presencia acogedora alegraba los días. En mi mente sólo cabe la imagen de una mujer que era perseverante y optimista, que siempre luchaba para darme lo mejor.
Mamá, hoy en día sólo tengo palabras de aliento y agradecimiento para ti. Gracias a ti mi vida ha cambiado y sé que tus consejos y fortaleza para protegerme han hecho que vaya por buen camino.
Mil gracias, mamá. Hoy en mi corazón no hay nadie como tú; porque fuiste tú la persona que cambió mi vida y sigues alegrándola con tu apoyo y cariño.
"Manos las de mi madre, tan acariciadoras,
tan de seda, tan de ella, blancas y bienhechoras...."
Si lugar a dudas no hay sobre esta tierra un ser humano que llegue a amar tanto como una Madre...
Bendiciones...*"
tu blog esta bien nice!!!!
Sigue adelante