Cuando alguien nos ofende nuestra primera reacción es alejarnos de esa persona, pero debemos evaluar calmadamente si vale la pena dejar morir una amistad, un hogar, una relación cualquiera a cambio de tener que vencer nuestro orgullo y tomar la iniciativa de acercarnos nuevamente.
Pero es difícil dar ese primer paso en busca del acercamiento que tanto deseamos. Casi siempre decimos: “Sí, le perdono, pero que venga él primero a pedírmelo”.
Son numerosos los casos de familias, noviazgos rotos, amistades perdidas sólo porque ninguno tuvo el valor de ser el primero en acercarse por temor a ser rechazado, o simplemente por no tener la fuerza suficiente para vencer un mal entendido orgullo.
Seamos siempre quien dé el primer paso y sí después de buscar reconciliación la otra persona no quiere aceptar nuestras palabras, quizá habremos perdido a un amigo pero habremos ganado la satisfacción de cumplir con nuestro deber, y si alguien se nos adelanta y nos busca primero, démosle nuestra pronta acogida, que cuando alguien busca una reconciliación no se rebaja sino por el contrario; se enaltece ante Dios, ante sí mismo y ante sus semejantes.
7 Comments:
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Si es cierto que se puede perdonar, pero hay que ser sinceros con nosotros mismos y con los demás, algunas palabras que nos agreden simplemente marcan nuestro corazón, y nuestra existencia...por eso aquello de que...Errar es de humanos...El perdonar...Si el perdonar es divino....
Bendiciones...*"
"Nos fallaron dos palabras,
y sabernos perdonar
que fácil era haber dicho lo siento.
Pero nos sobraba orgullo
y nos falta vanidad...
y puse tanto esfuerzo
en ser el primero en hablar.
que cuando un se atreve
es tarde ya... "
Creo que existen muchas formas de pedir perdón. No puede caber la posibilidad de quedarnos conformes con solo hacer lo nuestro. Aquella persona no es diferente por el hecho de haber tenido un roce conmigo. Sin embargo, hay que ser firmes en la decisión de poder intentar algo y arriesgarse.
El perdón no es una causa o un motivo. Puede ser dubitativa la relación entre perdón y odio, porque uno puede llevar al otro a extremos nunca vistos.
Dar el primer paso no es solo pedir perdón a otra persona. Dar el primer paso no es pedir perdón solo a los que nos ofendieron, sino a los que ofendímos.
Ojala este escrito nos enseñe que el amor al projimo, no depende unicamente de sucesos poco agradables, sino más bien, depende de la relación que tengamos con nosotros mismos.
Sabes sé que a varios nos cuesta dar el primer paso, pero sé que a veces es necesario, porque la mayoría de los seres humanos somos orgullosos y creo que en alguna ocasión deberíamos de ser un poco más humildes.
Cuidate, bendiciones..!!